Piel con piel o Método Mamá Canguro Verificado

Nils Bergman, pediatra neonatólogo, investigador de renombre en neurociencia perinatal, demostró la importancia del papel de la madre durante las primeras horas de vida del bebé y los efectos negativos de la separación madre-bebé durante esta fase a nivel fisiológico y neurológico.

El piel con piel NO es una moda si no un método establecido en bases científicas, el método Mamá Canguro, MMC (en inglés, KMC, Kangaroo Mother Care). Si quieres leer más sobre este estudio dirigido por Nils Bergman y apoyado por la Organización Mundial de la Salud, puedes hacerlo en el siguiente enlace.

Este estudio, Immediate “Kangaroo Mother Care” and Survival of Infants with Low Birth Weight, se realizó en 5 hospitales en Ghana, India, Malawi, Nigeria, y Tanzania con neonatos con un peso entre 1 y 1.799Kg y demostró que el contacto inmediato piel con piel da una oportunidad a los bebés prematuros, incrementando la esperanza de vida y los diagnósticos de salud.

El estudio concluyó que los bebés que recibieron Cuidados Madre Canguro inmediato tuvieron una mortalidad menor a los 28 días que los que recibieron atención convencional y Cuidados Madre Canguro iniciados después de la estabilización.

Los primeros cuidados del recién nacido, pruebas y otros controles deben realizarse con el bebé sobre la madre dados los múltiples beneficios que ejerce esta técnica, apoyada por la OMS y la Asociación Española de Pediatría (AEP), sobre la madre y el bebé.

El pasado 15 de Noviembre (2022), la OMS presentó las nuevas directrices para mejorar las posibilidades de supervivencia y los resultados de salud de los bebés nacidos prematuramente (antes de 37 semanas de gestación) o pequeños (menos de 2,5 kg al nacer).

Beneficios del piel con piel

1. El contacto piel con piel durante los 30 minutos posteriores al parto, ayuda a segregar oxitocina que favorece la involución uterina, volviendo a su tamaño original y reduciendo el riesgo de hemorragia.
2. Favorece el bienestar materno y el vínculo madre e hijo.
3. Favorece la lactancia materna y el agarre.
4. Mejora el desarrollo neuronal y la regulación emocional infantil.
5. Reduce el estrés y la ansiedad, evitando la depresión post parto.